A problemas comunes, soluciones colectivas

Las puertas

Para la orientación de las personas con discapacidad visual es fundamental que las puertas destaquen de las paredes y fachadas. Para facilitar la localización de una puerta, ésta o el marco de la puerta debe tener un color que contraste con el color de la pared o fachada.

Las personas con discapacidad visual suelen utilizar el escalón de la puerta como ayuda para orientarse; con la ayuda del bastón blanco se registra cuando se ha pasado por una puerta.

Recomendación:

• Todas las puertas que se abren manualmente deben tener manijas de un color que contraste con el color de la puerta.
• La diferencia de contraste entre la puerta o el marco de la puerta y la pared debe ser de al menos 30 en el valor de reflexión de la luz LRV según la escala NCS (aproximadamente 0,4 de diferencia en el brillo).

Puertas con bisagras laterales

Para que las personas ciegas y con discapacidad visual puedan moverse con seguridad, todas las puertas con bisagras laterales deben abrirse hacia la habitación. Minimiza el riesgo de chocar contra una puerta. Si las puertas se abren hacia afuera, es importante que no se coloquen dos puertas directamente una frente a la otra, ya que las personas ciegas y con problemas de visión pueden correr el riesgo de quedar atrapadas entre ellas.

Las puertas batientes que se abran manualmente deben estar provistas de un mecanismo de cierre para que no queden entreabiertas, con riesgo de colisión.

Recomendación:

• Las puertas con bisagras laterales deben abrir hacia espacios, a menos que sean vías de escape, y no hacia afuera.
• Las puertas con bisagras laterales deben estar equipadas con un mecanismo de cierre para que no queden entreabiertas.
• Debe garantizarse que las personas ciegas y con problemas de visión no queden atrapadas entre puertas que se abren hacia dentro y hacia fuera. Para garantizar esto, las puertas deben tener bisagras en el mismo lado y abrirse en la misma dirección.
• Las puertas con mecanismo de cierre deben tener una fuerza de apertura máxima de 25 N (correspondiente a un peso de aproximadamente 2,5 kg).

Puertas correderas automáticas

Las puertas más accesibles para personas ciegas y deficientes visuales son las puertas correderas automáticas. Las puertas automáticas se utilizan en muchos lugares como puertas exteriores y, en general, crean una buena accesibilidad para todos.

Recomendación:

• Las puertas más accesibles son las puertas automáticas con sensores sin contacto.
• Se debe garantizar que las puertas automáticas estén abiertas el tiempo suficiente, al menos 6-7 segundos, para que una persona discapacitada o ciega con un perro guía pueda pasar fácilmente.
• Los pulsadores para puertas automáticas son difíciles de localizar y no se recomiendan.
• Si es necesario accionar un botón o similar para abrir una puerta, se debe garantizar que el dispositivo de activación pueda ser localizado por personas ciegas y con deficiencia visual. Esto se hace i.a. mediante el uso de colores contrastantes.
• Las puertas automáticas con bisagras laterales pueden representar un peligro para las personas con discapacidad visual que caminan en la dirección en que se abre la puerta.

Puertas giratorias

Las puertas giratorias son difíciles de utilizar para personas ciegas y deficientes visuales. Especialmente para los usuarios de perros guía, puede resultar difícil evaluar dónde está la hoja de la puerta al entrar en el carrusel, con riesgo de colisión. También es difícil evaluar cuándo podrá volver a "bajarse". Debería haber una puerta lateral como alternativa a las puertas giratorias, ya que puedes perder la orientación o sentirte inseguro ante la situación.

Recomendación:

• Dado que las puertas giratorias son difíciles de utilizar para personas con discapacidad visual, ésta se debe complementar con una puerta con bisagras laterales o una puerta corredera en las inmediaciones de la puerta giratoria.
• Si existen líneas guía establecidas, ésta debería conducir a la puerta con bisagras laterales o a la puerta corredera.

Puertas de cristal

Las puertas de cristal son difíciles de percibir para las personas ciegas y deficientes visuales, pero también para otras personas. Cuando hay luz por ambos lados, el vidrio puede percibirse como un agujero en la fachada o en la pared, con un alto riesgo de colisión. Por lo tanto, todas las puertas de vidrio deben estar marcadas con un material de color contrastante a diferentes alturas. La marca debe colocarse de tal manera que algunas personas con discapacidad visual se orienten hacia adelante a la altura de los ojos, otras busquen las manijas de las puertas y otras se orienten en el suelo con los ojos y el bastón.

Los colores claros combinados con colores oscuros permiten ver la marca con luz diurna y con luz artificial más débil. La diferencia en el valor de reflexión de la luz debe ser al menos 60.

Recomendación:

• Las puertas de cristal deben marcarse a la altura de los ojos (1,6 m), a la altura del tirador de la puerta (1,0 m) y a la altura de la puerta (0,2 m), para que la puerta destaque visualmente.
• Si se utilizan puntos, logotipos u otros gráficos, las marcas deben ser de material reflectante y lo suficientemente grandes (preferiblemente entre 0,1 y 0,2 m) para que sean visibles y lo suficientemente cercanas para que se perciban como una línea recta y con un valor de reflexión de la luz de al menos menos 60.
• La marca de la puerta debe ser claramente visible en todas las condiciones de iluminación, tanto desde el interior del edificio como desde el exterior.
• Las puertas de cristal en secciones de cristal deben marcarse de forma especialmente clara para que la puerta pueda distinguirse del resto de la fachada. La puerta puede estar enmarcado con una banda ancha preferiblemente de 0,1 a 0,2 m, con un valor de reflexión de la luz de al menos 30.
• Si se utilizan puertas de vidrio con bisagras laterales, es una ventaja que el tráfico entrante y saliente esté separado.

Manijas de las puertas

Para que las personas ciegas y deficientes visuales puedan utilizar los tiradores de las puertas, estos deben ser visibles, fáciles de localizar, colocados de forma lógica, fáciles de usar y fáciles de agarrar.

Recomendación:

• Todas las puertas que se abren manualmente deben tener manijas de un color que contraste con el color de la puerta.
• Las personas ciegas y deficientes visuales prefieren las manillas de palanca de un solo lado y las manijas de las puertas en forma de L o D. El extremo abierto de la manija de una puerta siempre debe colocarse hacia la puerta para evitar que una funda se atasque en la manija.

Salidas de emergencia, puertas cortafuegos y similares Evacuación. ¿Cuál es la necesidad?

En caso de incendio y otras situaciones de emergencia (inundaciones, tormentas, terror, etc.), pueden surgir situaciones en las que los edificios u otras construcciones deban abandonarse rápidamente. Cuando surgen situaciones potencialmente mortales, usted debe poder ser llevado a un lugar seguro de manera rápida y eficiente, es decir, a una distancia segura del peligro.

La experiencia demuestra que las personas expuestas al estrés suelen recurrir a lugares conocidos o que le son familiares. Como resultado, a menudo se eligen las rutas de acceso habituales, lo que puede exponer a las personas a condiciones críticas más rápidamente. Cuanto mayor sea el grado en que se incorporen rutas alternativas en las rutinas diarias, mayor será la probabilidad de que se pueda utilizar una ruta de escape alternativa y, por tanto, más segura.

Recomendación:

• Señalización accesible, señalización de vías de evacuación: las normas vigentes prescriben la señalización visible de las vías de evacuación.
• Los carteles con escritura en forma accesible ( ver capítulo 4.3 Carteles y paneles de orientación ) se colocan a la altura de los ojos. Esto también beneficiará a las personas con visión normal, ya que, por ejemplo, el humo puede difuminar el texto de los carteles colocados bajo el techo.
• Diseño o estructura reconocible de las puertas de evacuación: esto se puede conseguir, por ejemplo, mediante la elección del color (contrastes), pero la estructura también debe diferir de la de las puertas normales, para que las personas invidentes puedan identificarlas inmediatamente con la mano.
• También se recomienda colocar un campo direccional junto a las puertas de las rutas de escape, que se pueden identificar con los pies y el bastón blanco.
• Las escaleras descendentes de las rutas de escape deberían estar marcadas con campos de atención de acuerdo con las instrucciones dadas en el capítulo 6.2.4.6.3 Campos de atención en interiores.
• Los pasamanos en las escaleras de las rutas de escape deben ser continuos y contener marcas táctiles del piso e indicación de terminación. Al final de las escaleras de la ruta de evacuación se debe colocar un campo direccional para que la persona ciega pueda salir del edificio.
• La iluminación de emergencia y de pánico debe garantizar que se mantenga un nivel de iluminación adecuado para facilitar la identificación de la ruta de escape. Esto también beneficiará a las personas con visión normal.
• Se recomienda que la notificación se realice de forma hablada para obtener una notificación suficientemente clara de todos los interesados ​​y que no pueda dar lugar a malentendidos.
• En edificios de acceso público (por ejemplo, centros comerciales, bibliotecas, terminales de transporte) se recomienda que el personal esté especialmente capacitado para manejar e indicar rutas de escape para personas con discapacidad visual.
• En los lugares de trabajo o en edificios donde transitan habitualmente personas con discapacidad visual (p. ej. centros de estudios, pabellones deportivos, lugares de trabajo específicos), se recomienda realizar periódicamente simulacros de evacuación especialmente organizados, para que, entre otras cosas, Se informa a las personas con discapacidad visual sobre rutas de escape alternativas. La formación debe ser realizada tanto por empleados como por personas ciegas o con discapacidad visual.
• Las puertas cortafuegos en los pasillos deben tener bisagras laterales en el mismo lado, a lo largo de todo el pasillo. Si en un pasillo hay diferentes puertas cortafuegos de distintos anchos, la puerta más ancha siempre debe estar en el mismo lado en todo el pasillo.
• Las salidas de emergencia deben estar equipadas con una barra antipánico, es decir, un mecanismo de apertura en todo el ancho de la puerta.