A problemas comunes, soluciones colectivas

La orientación y la movilidad

 

 

José Umaña Morales, Nosotros los Ciegos y Deficientes Visuales

"A problemas comunes, soluciones colectivas para cada discapacidad"

Los ciegos y los deficientes visuales crean una rutina mental de su recorrido diario, haciendo uso de las referencias y pistas sensoriales que el mismo ambiente le va ofreciendo. 

Cualquier alteración o cambio de esta rutina le causa desoriente espacial.

es por eso que toda remodelación que se haga dentro del hogar, trabajo, casa de estudios y de ser posible en la comunidad, debe ser notificada y antes de realizarse debe tenerse la consideración necesaria hacia estas personas. Al quitar una pared de un sitio se genera un cambio en la percepción de la presión y profundidad de este espacio, altera la propagación del eco, desvía la corriente del aire y la entrada de luz. Esto quiere decir que la persona con discapacidad visual no solo no va tocar más la pared que siempre estaba en su sitio y que usaba para obtener referencia, orientarse y alinearse con ella para caminar en línea recta para así poder llegar al mismo sitio, sino que también altera la estructura de percepción en algunos de sus canales receptores – oído, tacto, olfato -. Es recomendable consultar la opinión de la persona con discapacidad visual y de un experto.

Los cambios de inmobiliario dentro del hogar también deben ser anticipados o anunciados una vez se que se hagan y de no ser necesario, se recomienda no realizarlos. Debe tenerse especial cuidado con las puertas y ventanas, éstas deberán estar totalmente cerradas o totalmente abiertas, siempre pegadas y alineadas con la pared, al dejarlas semi-abiertas, colocamos en riesgo a las personas con discapacidad visual.

Ante situaciones de peligro debemos evitar usar la palabra cuidado, ya que colocamos en situación de alerta a la persona sin tener un conocimiento claro de lo que debe cuidarse y hacia donde está ubicado el peligro. Debemos solicitarle que se detenga con palabras como “detente”, “espera” o “para y explicarle el porque, de esta manera estamos dando tiempo a que tome las previsiones correspondiente sin alterarse.

 

 

¿Cómo guiar a una
  persona ciega? 

 
  • No impongas tu ayuda 
  • Pídale a la persona que se sujete a su brazo, no al revés. 
  • Manténgase un paso por delante 
  • Señale los diversos obstáculos que se interponen en su camino

En la calle

 

Primero, pregúntale si necesita ayuda: ¡una persona parada frente a una carretera puede estar simplemente analizando el tráfico antes de cruzar! Si va acompañada de un perro guía, no toque al perro ni al arnés y colóquese del otro lado.

Deje que le agarre el brazo o el hombro y dé un paso adelante . Esto permite a la persona guiada anticipar irregularidades en el terreno sin necesidad de señales verbales. Disminuir la velocidad también indica la proximidad de un obstáculo.

Describirle el entorno y las rutas para proporcionarle puntos de referencia que le ayuden a orientarse.

Señalizar en el momento oportuno una acera o una escalera para bajar o subir. También puedes preguntarle si prefiere agarrarse a la barandilla. Si puede elegir entre una escalera normal y una escalera mecánica, déle la opción para que elija la que le resulte más cómoda. Tienes que advertir a la persona en el último paso .

En el transporte público

 

Simplemente acompañe a la persona hasta la entrada y ponga su mano en la rampa . Dentro, pregúntale si quiere sentarse y dónde quiere sentarse. Entonces bastará con apoyar la mano en el respaldo de un asiento y podrá sentarse sin dificultad.

En el caso de un automóvil, es importante indicar por dónde debe subir. Simplemente ponga su mano en la puerta abierta y podrá encontrar su camino. Para salir, dile si es posible abrir la puerta y cómo hacerlo.

En el exterior

 

Mantenga las puertas abiertas o cerradas; una puerta entreabierta puede ser peligrosa.

Una vez dentro, puede ayudar a la persona a visualizar la(s) habitación(es). Descríbale y déjelo explorar su entorno haciendo que toque muebles y objetos.

"Un lugar para cada cosa y cada cosa en su lugar". No mueva muebles y objetos sin avisar a la persona, especialmente sus efectos personales.